La intervención se ha realizado en una antigua Estación del Tranvía de Sierra Nevada y el apeadero del Charcón. Ubicados en la localidad de Güéjar Sierra, situado en la provincia de Granada. A más de 1000 metros de altitud, en la vertiente noroeste del Parque Natural de Sierra Nevada.
El ferrocarril de Sierra Nevada fue un formidable procedimiento romántico de penetración en El Parque Natural de Sierra Nevada, en sus vagones llevaron y trajeron las ilusiones de los montañeros granadinos durante casi cincuenta años. El tranvía de Sierra Nevada se ha convertido en una leyenda, conocedora por muy pocas personas y que con el paso de los años irán desapareciendo llevándose consigo esos recuerdos.
Durante el proyecto inacabado del tranvía se construyeron varias estaciones y apeaderos en algunos tramos del trayecto. Cerrado el tranvía estas estaciones se abandonaron. Actualmente algunas de estas estaciones le han dado el uso de restaurante, pero la Estación y el apeadero del Charcón siguen en desuso. Es sorprendente como tales edificios, tan bien conservados, con tanta historia a sus espaldas, con tanto encanto, personalidad y situados en este maravilloso paraje natural ha caído en el olvido y abandono.
Es a considerar las numerosas personas que transcurren por este lugar, pasando la mayoría por la misma puerta: senderistas realizando rutas, montañeros que se dirigen a Sierra Nevada, excursionistas que desean pasar el día en estos enclaves espectaculares, escaladores, cicloturistas etc. Lo más probable es que la mayoría de todas estas personas desconozcan la historia del tranvía de Sierra Nevada y por lo tanto desconozcan la existencia de estos dos edificios.
El Centro de Visitantes ha sido proyectado como otra puerta de acceso al Parque Natural de Sierra Nevada. Un espacio que contenga y ofrezca información y venta de la historia del tranvía, de Güejar Sierra y todo lo relacionado con rutas y senderos del Parque Natural, impulsando el crecimiento de nuevas actividades en la zona. También zonas de ocio y relajación, que aporte al turismo y gente de la zona un espacio para el disfrute y la serenidad en un entorno rural.
En la realización de la distribución se ha tenido en cuenta la función y el uso de cada zona, la iluminación, el techo y los recorridos, facilitando la localización de cada punto, integrando todos los conceptos de diseño, mobiliario, comunicación y necesidades de trabajo específicas. Un espacio de usos múltiples impulsando las relaciones sociales.
El mobiliario ha sido diseñado exclusivamente para este proyecto. Todo el equipamiento del centro está integrado, con los mismos materiales, colores y texturas. Siguiendo una línea acorde con la ubicación de montaña donde se encuentra.
Los Alojamientos han sido pensados como elemento diferenciador y un complemento al Centro de Visitantes. Este edificio se dispone penetrado en la montaña con cuatro habitaciones con baño privado en cada una. Una habitación adaptada a personas con movilidad reducida, dos con cama de matrimonio y una con dos camas individuales. También se incorpora una zona exenta a las habitaciones para situar las instalaciones y espacio para guardar las bicicletas. Aprovechando la cubierta plana para situar a cada habitación un lucernario, de modo que los usuarios puedan tener intimidad en la fachada principal sin ventanas y de noche puedan disfrutar de dormir viendo las estrellas en este paraje natural que les rodea.